La contaminación del aire representa un importante riesgo para la salud y algunas enfermedades respiratorias se han incrementado entre la población.

Las condiciones ambientales como la contaminación y los cambios en el clima han ocasionado un aumento en los casos de asma, no sólo en los grupos vulnerables integrados por niños y adultos mayores, sino también en adultos jóvenes.

En México, esta enfermedad de las vías respiratorias afecta a 10% de la población y cada año mueren 6,000 personas por asma, bronquitis y enfisema pulmonar.

De acuerdo con el secretario de Salud, José Narro Robles, el problema no es nada más de la Ciudad de México y expuso que el sistema de monitoreo, control y vigilancia epidemiológica podría ampliarse a otras ciudades, como Guadalajara, Monterrey y Puebla.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), el asma se encuentra entre las primeras cinco causas de mortalidad en el país y el número de ingresos hospitalarios por crisis asmática se duplica en los días que la contaminación del aire es elevada.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) atiende en promedio 270,000 casos de crisis asmáticas al año, muchas de las cuales son provocadas por exposición a altos niveles de contaminación atmosférica.

Mientras que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que en el mundo existen aproximadamente 300 millones de personas con este padecimiento, y que en una década serán 450 millones.

El asma es un mal que se caracteriza por la inflamación y obstrucción de las vías aéreas a consecuencia de factores de riesgos genéticos y/o ambientales. Y de acuerdo a especialistas esta enfermedad está subdiagnosticada, pues por cada paciente detectado existe otro que lo ignora, y ante esto se debe estar atentos a los síntomas que son falta de aire, silbido al respirar y tensión en el pecho, además de tos.

La OMS alerta de la influencia de la contaminación ambiental en la salud respiratoria de la población. Entre los datos difundidos, destacan, como contaminantes potencialmente dañinos, el ozono y el material particulado menor de 10 y 2.5 micras (PM10 y PM 2.5, respectivamente). Así pues, la contaminación del aire se ha convertido en un importante riesgo medioambiental para la salud, bien sea en los países desarrollados o en los países en desarrollo.

Para la Cofepris, desde el 14 de marzo a la fecha se ha presentado un incremento en las consultas médicas por problemas de asma y conjuntivitis asociadas a los altos niveles de la contaminación.

“Si ha habido aparición de nuevos casos de asma y de nuevos casos de conjuntivitis y también ha habido la agudización en pacientes que ya tenían asma, y pacientes que ya tenían problemas de conjuntivitis, a causa de la contaminación de estos últimos eventos”, dijo Julio Sánchez y Tepoz, comisionado federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Cofepris.

Explicó que esto está determinado, a través del monitoreo realizado en diversas hospitales de la zona metropolitana del Valle de México donde se cuantifican específicamente las consultas médicas por enfermedades derivadas de la contaminación ambiental: asma, conjuntivitis, otitis e infecciones respiratorias.

La OMS señala que mediante la disminución de los niveles de contaminación del aire los países pueden reducir la carga de morbilidad derivada de accidentes cerebrovasculares, cánceres de pulmón y neumopatías crónicas y agudas, entre ellas el asma.

Es decir, cuanto más bajos sean los niveles de contaminación del aire, mejor será la salud cardiovascular y respiratoria de la población, tanto a largo como a corto plazo.

Fuente: Notimex, OMS, SINAVE, Dirección General de Epidemiología (DGE).